Se produce una disputa (también conocida como contracargo) cuando el titular de tarjeta cuestiona tu pago ante el emisor de la tarjeta. El emisor de la tarjeta crea una disputa formal que revierte inmediatamente el pago. El importe del pago, junto con una comisión por disputa recibida separada que cobra la red de tarjetas, se deduce del balance de tu cuenta.

Existe un proceso de resolución de disputas mediante el cual puedes responder y presentar evidencia para demostrar que el pago era válido. Si decides refutar la disputa, se aplicará una comisión por refutación de disputa (excluidas las empresas en México y Japón), además de la comisión por disputa recibida. Si la disputa se determina a tu favor, el importe disputado y la comisión por refutación de disputa se te devuelven. Si se confirma la disputa, la decisión del emisor de la tarjeta es definitiva y no recibirás un reembolso.

Ten en cuenta que el ciclo completo de una disputa, desde su inicio hasta la decisión final del emisor de la tarjeta, puede llevar de 2 a 3 meses.

Puedes obtener más información sobre el proceso de disputas de Stripe y las disputas en la plataforma Connect.